El peligro de trasladar contenedores sin el amarre debido
Diario "El Carabobeño", 21 de febrero de 2013
Por Litzy Sanz Nava.- Aunque sin la pérdida de vidas humanas, la caída de un contenedor es un hecho cada vez más común en la ciudad porteña, (dos en los últimos tres días). Urge que se cumplan los dispositivos de seguridad requeridos para el traslado de este tipo de cargas A diario, cientos de conductores porteños, como Mariana Robles, enfrentan uno de sus peores temores: desplazarse por una autopista o carretera al lado o detrás de una gandola que traslada contenedores. En algunas ocasiones, como el lunes pasado, por una mala maniobra del conductor de la pesada unidad o a la falta de uso de los dispositivos de seguridad, el equipo cae encima de un vehículo ocasionando pérdidas que en el municipio Puerto Cabello, en 90% de los casos, afortunadamente son sólo materiales, expresan los ciudadanos entrevistados sobre el tema. Desde hace décadas al menos dos veces al año, las autopistas Puerto Cabello-Valencia y la Sorpresa-Muelles, de Puerto Cabello, se convierten en escenario de un incidente en el que un contenedor pone en riesgo la vida de personas que por lo general son ajenas a la actividad portuaria. La mañana del lunes, a la altura de El Palito, un contenedor que era transportado en una gandola, cayó sobre el maletero de un vehículo. Aún en shock por el incidente, el conductor del carro fue examinado por personal paramédico del Cuerpo de Bomberos Municipales para determinar que efectivamente había salido ileso del impacto. Para Mariana Robles la noticia sólo hizo que profundizara en el temor que siente a desplazarse al lado de un transporte de cargas. Como ella, muchos porteños consideran prudente una revisión a los procedimientos que en sintonía con una estricta norma para el desplazamiento de estas cargas (Resolución 009606 del año 2003 y artículo 32 de la Ley de Tránsito) rigen el desplazamiento de este tipo de cargas. Manuel González, ex portuario jubilado y ahora conductor de taxi, sugiere apuntar la mira a la salida de estos transportes desde las almacenadoras ubicadas en la urbe porteña, específicamente en los parques industriales de La Belisa, La Elvira y detrás de Makro. La actitud imprudente de parte del sector, también podría ser factor determinante para este tipo de incidentes: El parte oficial ofrecido por la Policía de Carabobo, sobre el accidente del lunes pasado en El Palito, indica que la caída del furgón se suscitó a consecuencia de un giro en U en una sección de la autopista en la que una unidad de carga pesada no debe efectuar este tipo de maniobras sin riesgos. Este miércoles en la tarde un nuevo incidente paraliza la única vía de penetración hacia la ciudad porteña. Una gandola que transportaba mallas de construcción proveniente de Valencia con destino a los muelles porteños, volteó su pesada carga en las inmediaciones de la autopista, a la altura del Liceo Bolivariano Miguel Peña. El incidente no dejó personas heridas, pero sí cuantiosas pérdidas materiales. Autoridades de Tránsito Terrestre encargados de levantar el accidente, precisaron que la carga no cumplía las normas de amarre y sujeción exigidas por el reglamento que rige el desplazamiento de cargas pesadas. Aunque con poca frecuencia y sin la pérdida de vidas humanas, la caída, de un contenedor se vuelve cada vez más usual en la ciudad porteña (dos en menos de una semana), por lo que urge que se cumplan los dispositivos de seguridad requeridos para el traslado de este tipo de cargas. Con información de Leonardo Colmenares Torres. Autoridad portuaria se pronuncia Desde la dirección general de Bolivariana de Puertos en Puerto Cabello, el G/B Henry Montilla, explicó en declaraciones exclusivas para El Carabobeño, que por norma de carácter irrestricto, la estatal exige a las empresas transportistas, cumplir con los dispositivos de seguridad. Los procedimientos son recalcados al momento del registro en primera instancia. Adicionalmente, en cada charla que se dicta a través del personal de la Gerencia de Seguridad Laboral y Ambiente; se da a conocer la norma de dispositivo de Amarre y Sujeción que tiene el puerto para todos los vehículos pesados. Y para finalizar, el personal de esa misma gerencia realiza una inspección en cada vehículo cargado que sale de nuestros patios y almacenes, precisó el director del puerto. En cuanto a los accidentes suscitados en la vía, la autoridad portuaria recordó que no todos los vehículos pesados que se trasladan por la autopista con cargas pesadas, salen desde la zona portuaria. "Hay muchas almacenadoras fuera del recinto portuario que deberían manejar sus propios sistemas de revisión", aclaró. Gremio containero se defiende En representación del sector, William Perozo, secretario general de la Asociación de Pequeños y Medianos Empresarios del sector transporte de contenedores y sus similares, asegura que en cada encuentro o asamblea realizada por este ente, se le "lee la cartilla a los choferes para que tomen las previsiones pertinentes, no solo en materia de amarre y sujeción de las cargas, sino también en cuanto a "la revisión de las unidades principalmente los neumáticos", precisó. Afirmó que también se instruyen a los miembros del sector sobre el sentido común y respeto a la normas de Tránsito durante el desplazamiento en avenidas, calles y autopistas de la ciudad porteña. Autoridades portuarias y gremio coinciden, sin embargo, en que los riegos se incrementan por la cultura que existe entre el colectivo de choferes de gandolas, quienes pasan largas horas sin dormir, o realizan viajes largos, y se mantiene despiertos bajo sustancias como café o bebidas energizantes.